Esta mañana se presentó la iniciativa “Niñez migrante en Argentina. Logros y desafíos a 20 años de la Ley de Migraciones” organizado por CAREF, UNICEF y el Ministerio Público de la Defensa. La actividad fue la primera de una serie de mesas y diálogos interinstitucionales que tendrán lugar en Buenos Aires, Jujuy y Misiones los próximos meses, para producir un diagnóstico colaborativo que fortalezca la protección y el acceso a derechos de las infancias migrantes.
Stella Maris Martínez, Defensora General de la Nación, tuvo a cargo las palabras de bienvenida y remarcó que en nuestro país la protección integral de niños, niñas y adolescentes está estereotipada: “el sistema de protección integral imagina a un tipo de niño y niña pero excluye a las diversidades. Tiene una lectura unidireccional y deja por fuera a todo un universo de sujetos, entre los que se encuentran los niños y niñas migrantes”. Además, la funcionaria resaltó el trabajo que desde la Defensoría vienen realizando tanto en la Comisión del Migrante como en la de Refugiados para desarticular diversas trabas burocráticas que limitan o impiden el acceso a derechos de la población en movilidad.
Luego fue el turno de Gabriela Liguori, Directora Ejecutiva de CAREF, quien reflexionó sobre las transformaciones en materia de política migratoria y de protección de niños, niñas y adolescentes en estos 40 años de democracia. A pesar de los cambios profundos de paradigma que implicaron las leyes de migraciones, de protección de personas solicitantes de asilo y la que refiere a las infancias y adolescencias, Liguori afirmó que en la actualidad se observa un recrudecimiento de las vulneraciones de derechos de las personas migrantes, siendo los niños, niñas y adolescentes las más perjudicadas. “Hay que darle a las políticas migratorias y de asilo un enfoque de niñez, y a las de niñez un enfoque que mire las cuestiones migratorias desde los Derechos Humanos, de modo tal que los principios de igualdad y no discriminacion estén presentes, no solo en la letra sino en la aplicación de la normativa”, aseguró la experta.
Alejandro Morlachetti, especialista en protección y acceso a la justicia de UNICEF, cerró el primer panel haciendo fuerte hincapié en la obligación de los Estados de garantizar el acceso a los derechos de los niños, niñas y adolescentes, más allá de la condición migratoria. El funcionario resaltó que, si bien existe una intención de mejorar esta situación, aún persisten obstáculos en materia de acceso a derechos basados en cuestiones administrativas. Además reconoció el rol de CAREF como un actor clave para identificar cuáles son los temas centrales sobre los cuales trabajar, desde una mirada estratégica.
Pablo Ceriani Cernadas, del Comité de Derechos de Migrantes y sus Familias (ONU) y de la Especialización en Migración y Asilo (UNLa), enfatizó la importancia de los estándares e instrumentos de derechos humanos, que fueron reconocidos por los gobiernos de la región. “Estos estándares no dejan ninguna duda respecto de qué es lo que debe hacerse. Y en el caso de la niñez migrante, no podemos dejar de señalar que irregularidad migratoria es igual a desprotección”.
Cerró el encuentro Gisela Clivaggio, Directora Nacional de Gestión y Desarrollo Institucional de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la Nación (SENAF). A través de datos provenientes de diversas fuentes, presentó un panorama de la situación de la niñez migrante e hizo hincapié en la necesidad de construir un diagnóstico integral, tarea a la que el organismo está abocado en este momento. Asimismo, expresó el compromiso de la SENAF en hacer efectivos los derechos de todas las infancias. “Los marcos normativos son importantes, pero en la práctica necesitamos políticas públicas, programas con presupuesto suficiente y procedimientos claros para garantizar el acceso efectivo a los derechos”, concluyó.
La actividad se realizó en el marco de un acuerdo celebrado entre CAREF y UNICEF para el abordaje de las problemáticas que afectan a niños, niñas y adolescentes migrantes en Argentina, a pocos meses de cumplirse el vigésimo aniversario de la Ley de Migraciones (2004), que expandió el acceso a derechos y facilitó la regularización de las personas y familias migrantes que viven en el país. “Los niños, niñas y adolescentes migrantes recibieron también la protección de una robusta estructura normativa y de diversas políticas sociales que contribuyeron a su bienestar. No obstante, la experiencia en terreno de diversas instituciones y organizaciones del Estado y de la Sociedad Civil alerta sobre ciertas brechas entre normas y prácticas, que pueden resultar en una protección desigual y en un desigual acceso a derechos de la niñez migrante y de sus familias”, aseguraron desde CAREF y UNICEF.